30 marzo 2018

Ministros nacional-católicos en pleno siglo XXI


No es ninguna sorpresa, ya lo venimos viendo durante años. Ellos son la continuación de la época más gris de este país, el franquismo. Y, aunque traten de disimularlo, hay momentos en los que no pueden evitarlo y, levitando, se manifiesta como son.

Y ahí los tienen, tan campechanos, tan del pueblo, tan carpetovetónicos, tan dinosaurios. Demostrando lo que son. Eso sí, creyéndose en posesión de todo el poder, con una voluntad de hacer lo que les venga en gana, a pesar de las leyes y de la Constitución, esa que tanto mientan y que tanto adoran cuando les conviene. Sí, con esa capa de impunidad que les viene con el cargo. Ministros impunes, por encima de la ley.

Los cuatro ministros chupacirios han demostrado en esta Semana Santa, como lo han venido haciendo en las anteriores, ese respeto por la Constitución, ese ejemplo de demócratas. Y lo han hecho, al cantar juntos y en unión de La Legión, en una procesión, el himno de ésta. Ya saben, ese que empieza con: “Soy el novio de la muerte”.

Y ahí estaban en Málaga, en primera fila, representantes de un Estado que en su Constitución se proclama aconfesional y, sin embargo como una actividad de su agenda ministerial, viendo que un cuerpo militar como La Legión participaba en un acto religioso. Y no sólo se han conformado con permitir ese ‘maravilloso momento’, es que además no han podido resistir la emoción y han cantado junto a sus amados legionarios su himno. Maravillosa escena digna de Berlanga, los ministros de Interior, Defensa, Justicia y Educación unidos bajo una bandera (por cierto, a media asta, por orden de la ministra finiquito). Un acto Educativo en Defensa de una Justicia Interior.

No se cortan un pelo, tienen bula, que para eso es Semana Santa, y la emplean en recordarnos que son impunes y que les importa un carajo lo que diga la Constitución. Por encima del bien y del mal está su nacional-catolicismo heredado, hoy más que nunca, con una bandera que hace juego con nuestra democracia, “a media asta”.

Su obligación, como bien han confirmado y siguen confirmando, nada tiene que ver con defender a su pueblo, sino a los grandes poderes, al Ejército y la Iglesia (por cierto una institución que recibe del Estado, según Europa Laica, 11.000 millones, entre subvenciones, exenciones, ayudas, impuestos no pagados y facilidades varias), unidos por la gracia de Franco, algo que todavía no se ha podido desatar. Y no, no asisten como creyentes, lo que no sería reprochable, sino como ministros, como poderosos personajes que permiten, aplauden y apoyan un acto, saltándose la aconfesionalidad de su amadísima Constitución. Y no sólo lo digo yo, ya se lo ha recordado el Defensor del pueblo, pero les da igual. Ellos van a por todas, que para eso son impunes.

Qué tristeza ver a estos carcas reaccionarios, altos representantes del pueblo, erigiéndose en unos perfectos meapilas que utilizan su poder en contra de lo que dice su ley de leyes. Una sensibilidad nacionalcatólica, uniendo ejército y religión, mientras que demuestran una absoluta insensibilidad con las víctimas del franquismo, de aquella detestable ideología. Son herederos de los torturadores, capaces de apoyar al novio de la muerte y olvidarse de las víctimas que defendieron el orden constituido hace ochenta años.

Doña Finiquito, a la sazón ministra de Defensa, esa que ha aumentado en 10.000 millones el presupuesto de Defensa, es la misma que nos ha dejado las banderas a media asta y que permite que los militares participen en más de doscientas actividades religiosas esta Semana Santa, la misma que ha ordenado un Plan General de Cultura y Concienciación de Defensa para que los niños de primaria, empiecen a saborear las virtudes castrenses y aprendan a cantar La Banderita. Esto sí que es cumplir la Constitución y ¡punto pelota!, que para eso son impunes.

Salud y República

25 marzo 2018

Cataluña: ¡Todos a la cárcel! Y ahora qué...


Las cárceles se están llenando de independentistas catalanes, muchos de ellos miembros del antiguo govern. El juez Llaneras y los fiscales, que pretenden ser héroes del nacionalismo centralista están, siguiendo las líneas que les marcan, y sustituyen la política por la venganza.

Ya hay veinticinco imputados, de los cuales dieciocho lo están por el delito de rebelión, y cada día ingresan más en la cárcel. Y sí, lo están por el delito de rebelión que, según dicen nuestras leyes, se trata de un delito cuya máxima ha de ser que haya provocado violencia. O sea, por ejemplo, el golpe de Estado de Tejero. Que yo sepa, la única violencia que se ha dado en Cataluña ha sido la del 1º de Octubre.

Desde luego enviar a prisión, sin ser juzgados, a estos independentistas (algunos llevan ya más de cinco meses) es una barbaridad como la copa de un pino. No sólo porque no existe el delito al que se refiere el juez y el fiscal (rebelión) sino porque están provocando una situación cada vez más complicada e injusta, que está produciendo una animadversión y odio mayor entre los independentistas y los nacionalistas españoles.

Hacerle el caldo al PP y a Ciudadanos puede llevar a una ruptura total, a dificultar las posibilidades de solución. Desde luego, que los últimos acontecimientos de prisión se acuerden un día después de que el candidato a President de la Generalitat haga un discurso suave, donde llama al diálogo, perturba el procés y pone más obstáculos en una salida pactada, dialogada.

¡Ya está bien! Del uso de la prisión preventiva no puede hacerse una regla general, porque no lo es. Es una excepción que sólo en casos muy concretos debe utilizarse. Es verdad que los independentistas han cometido errores, pero seamos justos. Todo empezó, con la no aceptación del estatuto de autonomía por parte del Tribunal Constitucional a instancias de Rajoy y su partido, cuando había sido aprobado por el Parlament, el pueblo catalán y el parlamento español. Y, para más inri, algunos de los artículos declarado anticonstitucionales, están en vigor en otros estatutos de autonomía, como el andaluz, el valenciano o el aragonés. Estoy convencido de que, sin ese recurso de anticonstitucionalidad puesto por el PP y con el estatuto recusado, no se habría producido todo lo que ha ocurrido en los últimos cuatro años.

Esta claro que a C’s, cuya lideresa no hace sino echar leña al fuego, y al PP, cuyo líder lo único que hace es marcharse del Parlament para no escuchar lo que no le gusta con sus tres compañeros, les interesa estas medidas de fuerza para hacer pesar, en el resto del Estado español, que son duros y vengativos, algo que parece que da votos fuera de Cataluña.

Pero no han entendido nada, no se puede hacer desaparecer, por arte de magia, a casi la mitad de los catalanes, el problema sólo puede tener una solución que sea pactada, dialogada, de no ser así, se seguirá creando odio, y tanto que hablan de coser (Arrimadas y C’s) lo que están haciendo es profundizar en esa zanja, cada vez más ancha. Y esa factura habrá que pagarla. Salvo en países no democráticos, las soluciones a conflictos territoriales nunca se han solucionado por la fuerza, porque al final, cualquiera sabe con qué consecuencias, se rompe la baraja.


Y sí, cada vez más, estoy convencido de que estos presos son presos políticos. Lo están por cuestiones políticas. Un preso político, sin comerlo ni beberlo, es por ejemplo Cuixart, mientras que un político preso es Granados. Hay una gran diferencia.

Por cierto, hoy veía en Twitter un comentario jocoso que merece ser leído: “Y si nombramos a Urdangarín Presidente de la Generalitat? A lo mejor así conseguimos que vaya a la cárcel”

Una petición a los independentistas: Que hagan valer su mayoría parlamentaria y nombren a un President. Mientras que no haya gobierno, hay que recordar que está en vigor el 155, y ya saben lo que eso conlleva.

Llibertat presos politics!

Salud y República

21 marzo 2018

El PSOE se une al PP y a C’s para manener la impunidad del Franquismo


Ellos son así. Mientras que el PP sigue con su adhesión franquista y actúa de forma coherente, el PSOE vuelve a tirar piedras contra gran parte de su propio electorado y se une al PP y a C’s (de estos últimos ni hablo, pues sus continuos vaivenes, buscando réditos electorales, son un ejemplo vil de populismo electoral) para no reformar la Ley de Amnistía y seguir amparando la impunidad franquista.

¡Qué lamentable! Cada vez, con más soltura se van desprendiendo de sus principios y se acercan más a C’s y al PP, haciendo que continúe esa discriminación de víctimas de terrorismo, donde las del franquismo son de última categoría y no tienen derecho a nada.

De qué sirve sacar una ley como la de la Memoria Histórica si luego no se busca Justicia para las víctimas y se deja que asesinos y torturadores como Billy el Niño y tantos otros queden sueltos sin pasar por la Justicia. Es de juzgado de guardia.

Ahí les ves, a los líderes socialistas, en las manifestaciones y concentraciones de la Memoria Histórica, manteniendo pancartas con el lema conocido: Verdad, Justicia y Reparación cuando niegan la Justicia para los torturadores y la Reparación del honor de las víctimas asesinadas.

Alegan inseguridad jurídica. ¡Qué barbaridad! Si así fuera no se podrían cambiar leyes establecidas. Y además, ¿inseguridad jurídica para quién? ¿Para Martín Villa, para Billy el Niño, para todos esos que fueron actores del genocidio franquista?

Eran muchos los que creían que, con Pedro Sánchez, el PSOE tomaría el camino de la izquierda. ¡Pobres ilusos! Los hechos demuestran quién es, dónde esta, y hacia dónde va. No ha entendido que, si bien la amnistía que se legisló durante la Transición podía tener cierto sentido hace cuarenta años para salir del franquismo, hace tiempo que debería haberse cambiado, no es tolerable que, una vez consolidada la democracia, se mantenga esa aberración contra las víctimas franquistas, las que pagaron con absoluta crueldad e injusticia su lucha por la libertad y la democracia. Las conductas contra los derechos humanos más elementales no pueden ser redimidas ni tienen prescripción posible.

Otra más de este partido enmascarado que enarbola la bandera de la República en los mítines y defiende a la Monarquía y a los torturadores de Franco en las instituciones. Que anuncia medidas a favor de las víctimas franquistas y cuando llega el momento no las cumple.

Se ve que bailar la yenka (izquierda, izquierda, derecha, derecha, delante, detrás…) no es sólo una afición de C’s. El partido de Pedro Sánchez lo practica y además con premeditación, alevosía y en contra de lo que dice que son sus propios principios.

A pesar del PSOE, que se ha unido a esa caterva pro-franquista, seguiremos pidiendo, hasta la saciedad, lo que las víctimas franquistas todavía, después de tantos años, no han conseguido: “Verdad, Justicia y Reparación”, vamos lo mismo que se les otorga a las demás víctimas del terrorismo.

Salud y República

19 marzo 2018

Para Defensa (otros diez mil millones): sí, hay dinero


Mientras que M punto Rajoy y sus muchachos repiten y vuelven a repetir que no hay dinero para subir el IPC a las pensiones (unos 1500 millones de euros), encuentran dinero para subir salarios públicos (justísimo), para igualar salarios de fuerzas de seguridad del Estado a otras autonómicas, para subir el sueldo a diputados y senadores un 1,5%, y para rescatar autopistas. Y todo ellos sin contar lo que se podría hacer con los 11.000 millones de euros que al Estado le cuesta la Iglesia.

Pues aún hay más. Está visto que nos debemos sentir muy amenazados. Probablemente algún enemigo ande cerca sin saberlo. Quizá nos ataquen de un momento a otro. Si no, es difícil explicar que en momentos de contención y recortes –aunque siempre es difícil de comprender--, se suban de forma espectacular los gastos de Defensa.

A ver si entendemos algo. En 2017 –a sabiendas de que hay, además, mucho presupuesto de Defensa, camuflado en otras partidas— el presupuesto de Defensa era de 7639 millones de euros y se han gastado, saltándose ese importe por medio de decretos-ley, casi 9000 millones, lo que supone un 18% más de los presupuestado, que ya era un 32% más que la de 2016 (5788 millones).


Bueno, pues después de esos datos tan increíbles e impresionantes –recordemos que durante ese tiempo, la mayoría de los gastos sociales han sido recortados o contenidos--, resulta que ahora nuestra amadisima ministra del finiquito simulado (Cospedal), hoy Ministra del ramo, ha decidido aumentar 10.000 millones más en jugar a los soldaditos, y tal incremento será aumentado en un próximo Consejo de Ministros. Además de amenazarnos con llegar en 2024 al 1,53% del PIB (unos 20.000 millones), que es lo que le pide la OTAN. Naturalmente, para estos gastos que nos defienden, no sabemos de qué, y que sirven para que nuestra Sra. Cospedal y los militares jueguen a batallitas, no hay problemas de incrementos bestiales.

Y es que, ellos son así:
·        Antes que las personas, los bancos (más de 40.000 millones regalados).
·        Antes que las personas, la empresas del IBEX (pagan de impuestos un 5% contra el 20% de los asalariados y pensionistas).
·        Antes que las personas, las autopistas en quiebra (4.000 millones)
·        Antes que las personas, la Iglesia (según Europa Laica, la Iglesia recibe entre subvenciones y lo que no paga un total de 11.000 millones al año).
·        Y, cuando hablamos de personas, naturalmente, defienden a los que más tienen. Lo último –que nunca llega--, para los más débiles, como son: dependientes, jóvenes, parados estructurales y jubilados.

Eso sí, espero equivocarme y que, una vez vista la reacción que hemos tenido los pensionistas, no nos dejemos engañar más y seamos capaces de acabar con este gobierno insensible y defensor de las oligarquías. Que el colectivo de mayores de 60 años no sea más el caladero de votos del PP. Si no, tendremos que buscar en la psiquiatría las causas, quizá un masoquismo exacerbado, o una especie de síndrome de La Moncloa, parecido al de Estocolmo.

Está claro que está en nuestras manos. Están asustados pero insisten en vacilarnos. Si continuamos saliendo a la calle, si seguimos pidiendo lo que es justo, lo conseguiremos. No entienden el lenguaje de la Justicia y la Equidad, son adictos al electoralismo y por ahí es por donde hay que atacarles.

Por cierto, vuelvo a insistir, los partidos políticos han de reunirse, en serio, en el Pacto de Toledo (sin Celia Villalobos, que es una rémora, como presidenta) y consensuar definitivamente un acuerdo que haga que se llegue a un digno Sistema Público de Pensiones.

Salud y República

16 marzo 2018

Manifestación por unas pensiones justas


Parece mentira, pero es verdad. No sólo nos esquilman, nos toman el pelo al subirnos el 0,25, sino que además el gran capo pepero comparece en el Congreso y pretende vacilarnos. O sea, pasa olímpicamente de las necesidades de los actuales jubilados y de los futuros, y pretende dar unas migajas a cambio de que le apoyen el presupuesto.

Pero no, están equivocados. Parece que las manifestaciones últimas, las del 8 de Marzo de la mujer y las de los pensionistas están rompiendo las costuras del PP, que no hace sino tratar de defenderse ante unos problemas que les están sepultando en la tumba de la ignominia.

No es de extrañar la actitud de Rajoy y sus muchachos en la comparecencia sobre las pensiones del pasado miércoles. Ellos son así, basta escuchar lo que dicen, sus declaraciones, y nos damos cuenta de que son coherentes en su defensa de los poderosos y de lo privado. Lo público es algo que les sobre, que pretenden minorizar y si es posible hacer desaparecer. Ellos están para defender a los bancos, a las empresas del Ibex, a la Iglesia. “Los jubilados bastante tienen con vivir más y con poseer una casa muchos de ellos”.

Los jubilados somos un grano que les ha salido en el culo y no saben cómo hacer para que no se infecte. Ellos que pensaban que tenían asegurado su caladero de votos en los mayores y resulta que se les han rebelado. Están que no viven, pensaban que los jubilados éramos unos tragaldabas y que nos tenían dominados.

Además de actuar de forma injusta y desvergonzada no han sabido calibrar quiénes somos los jubilados de hoy. Nosotros fuimos quienes tuvimos que aguantar el franquismo y luego luchamos por la democracia. Por ello, estamos acostumbrados a combatir por lo que es justo, por mantener nuestro Estado del Bienestar.

A esa fuerza combativa añadamos que tenemos tiempo, todo el tiempo para salir a la calle, para reivindicar, para insistir en nuestras justas reivindicaciones. No, que no crean que nos van a cansar. O cambian de actitud o los jubilados seremos la tumba del PP.

Y recuerden que ustedes, diputados y cargos públicos del PP, están ahí, en las instituciones democráticas, entre otras cosas porque gran parte de nuestra generación  luchó para salir de la dictadura. Claro que seguro habrían podido formar parte, perfectamente, de una Cortes no democráticas, como las franquistas, de donde muchos de ustedes provienen.

Su desprecio a los jubilados y a los principios democráticos es tremendo. Ahí quedan las manifestaciones de su portavoz Hernando que, sin ningún pudor, afirma que las manifestaciones no sirven para nada. ¡Vale!, pues nada, ustedes a echar un pulso, que veremos como termina.

Mañana será otra demostración de nuestra fuerza, porque en España, en más de cien ciudades saldremos a decirle Sr. Rajoy que no nos vacile, que no nos tome el pelo y que asegure un aumento equivalente al IPC para las pensiones, y que ponga en marcha el Pacto de Toledo donde se puedan asegurar unas pensiones dignas futuras para nuestros hijos y nuestros nietos. Por cierto, empiece por cambiar a la presidenta de esa comisión, porque la Sra. Villalobos no parece la persona más apropiada para llevar con éxito una comisión que necesita consensos y que crea en las pensiones públicas.

Y, por último, me gustaría hacer referencia a unas declaraciones de su ministro Montoro, ese que nos ha dejado un Estado de Bienestar flaco, el mismo que proclamó una amnistía fiscal inconstitucional. Y es que ahora dice que tomar como referencia el IPC para aumentar las pensiones es algo antiguo, que debemos fijarnos en el crecimiento. Pues mire usted, ¡adelante!, ¿por qué no nos suben el 3,1% que ha aumentado el PIB y no el 0,25%, o a qué crecimiento se refiere usted?

Basta ya de mentiras llenas de insensibilidad. O es que acaso no recuerda usted, Sr. Rajoy, lo que decía cuando estaba en la oposición:

¡Qué vergüenza!

Salud y República

14 marzo 2018

¡Dejad que los senadores se acerquen a mí!


No hay más que hablar. La iglesia católica, en nuestro país, es omnipotente. Y a las pruebas me remito.

Resulta que, a pesar de existir una sentencia firme, el abad del Valle de los Caídos, Santiago Cantera, se ha negado a cumplir la ley de Memoria Histórica y no permite las exhumaciones en la Capilla del Santo Sepulcro de la Basílica a pesar de que hay una sentencia firme para sacar dos cuerpos de ese cementerio público.

Con el fin de conocer las razones del abad, el Senado  le ha citado (curioso que se le cite en esta institución en vez de en el Congreso, ¿no será porque el PP tiene mayoría absolutísima en esta cámara?) y ha rehusado presentarse. Alude estar muy ocupado cumpliendo con su cargo eclesiástico. ¡Tiene huevos!

Pues bien, ahí le tienen ustedes, un señor abad con dos cataplines plantándose ante Patrimonio Nacional –institución propietaria del Valle de los Caídos--, la Justicia y una institución popular como el Senado. Imagínense ustedes que cualquiera se negara a cumplir una sentencia firme y que fuera llamado al Senado y se negase a ir, ¿qué pasaría? Pues aquí parece que no pasa nada, es más, en un acto de rendición absoluta la comisión del Senado ha accedido a una petición del abad para que sean sus componentes los que vayan al Valle de los Caídos si quieren hablar con él.

Los senadores socialistas se han negado a ir, mientras que los de Unidos Podemos se lo están pensando y los del Partido Popular están encantados de ir a ver al Abad, al que no nos extrañaría ver en las listas de las próximas elecciones como candidato pepero.

¡Inaudito! Perdónenme pero no lo entiendo. ¿Cómo es posible que un abad pueda impedir el cumplimiento de una sentencia firme y que además se niegue a ir al Senado a una comisión para que explique por qué no quiere cumplir la Ley de la Memoria Histórica? Pero, ¿qué país es éste? La contestación es muy simple: España. El único país donde el Estado se somete, en no pocas cuestiones, a una religión, producto y herencia de tiempos detestables donde el régimen asesino de Franco les confirió todo el poder.

A esa reunión no hay que ir. Sin que sirva de precedentes estoy de acuerdo con los socialistas. Ya está bien de plegarse y rendir pleitesía a una institución como es la Iglesia, que nos cuesta 11.000 euros al años (por cierto, si pagaran lo que reciben, podrían solucionar el problema de las pensiones, actual y futuro, en su totalidad) y que no hace sino poner problemas a temas candentes como es el de la Memoria Histórica, por no hablar del aborto o del matrimonio homosexual.

Y es que la Iglesia tiene mucho, pero que mucho, poder en este país. Por cierto, un Estado aconfesional según la Constitución, la ley de leyes a la que tanto aluden los peperos para ciertas cuestiones, y a la que tanto se saltan cuando les conviene.

Hay que obligar a que la Ley de la Memoria Histórica se cumpla de una vez. Sin más historias. ¿O acaso la Iglesia tiene bula para cumplir las leyes? Otro sometimiento más consentido. No hay que dar más vueltas. No termino de entender cómo pueden incumplir leyes y sentencias firmes, algo inaudito.

Por cierto, este tipejo cobra un sueldo público y no paga impuestos. ¡Hay quién dé más!

Ellos van a lo suyo, y eso que hablan de que su reino no es de este mundo. ¡Menos mal! Siempre tienen la biblia a mano para sus propios intereses. Por lo que no es de extrañar que aludiendo a unas palabras de Cristo, el abad haya tratado a los senadores como niños y en un alarde de condescendencia haya decidido reunirlos en su basílica, por aquello de: “¡Dejad que los senadores se acerquen a mí”, que para eso él es el que manda!

Salud y República

08 marzo 2018

¡Adelante, mujeres! La igualdad os espera


En primer lugar, no quisiera tener hoy, día de las mujeres, ningún tipo de protagonismo, por lo que humildemente escribo esta entrada sin otro objeto que reconocer unos hechos cuya desigualdad hace que las mujeres estén de huelga y empiece una etapa profunda, y ojalá que definitiva, que consiga la igualdad de derechos.

Pertenezco a una generación machista. Sin duda, machista. De un machismo exagerado que unido al papel que le hicieron, a la fuerza, jugar a la mujer en este país durante la dictadura franquista, agudiza la cuestión.

Fuimos impregnados con un barniz machista asqueroso, que hoy todavía nos dura a pesar de nuestros esfuerzos porque desaparezca. Hablo de principios de la segunda mitad del siglo XX, donde la mujer era, prácticamente, un objeto, o en el mejor de los casos un ser inferior.

Con la victoria franquista, las conquistas de la República, que empezaban a dar relieve e igualdad en sus derechos a la mujer, quedaron congeladas cuando no retrocedieron siglos. Es verdad que la dictadura criminal nos condenó a los vencidos a ser seres sin opinión, ovejas forzadas de un rebaño nacional-católico, pero las mujeres llevaron la peor parte.

Una mujer en los años cincuenta y sesenta no era mayor de edad hasta los 23 años. No podía abrir una cuenta corriente sin el consentimiento del 'macho protector'. Su misión era servir al hombre. Una mujer soltera con relaciones sexuales era una puta, si estaba casada las relaciones fuera del matrimonio estaban penadas por el código civil, mientras que el hombre que cometía adulterio era un ‘hombre’, un macho alfa, algo que se veía normal. La sumisión de la mujer era total. Los malos tratos existían, era algo conocido y casi consentido, lo que no había era la posibilidad de denunciarlos.

En todo, hasta en sus más continuas tareas era considerada algo subordinado. Las mujeres eran las que cocinaban, sin embargo quienes dominaban el mundo de la cocina eran los hombres, los cocineros. Recuerdo que se comentaba con orgullo: ellas cocinan más, pero los hombres son los mejores cocineros. Igual pasaba en el campo de la costura. Las mujeres cosían, sin embargo, el prestigio y el dominio en la moda era de los modistos, de los hombres.

Y tantos otros ejemplos… Baste decir que la mujer para obtener ciertos documentos o trabajos, debía hacer el Servicio Social. Una especie de canon que pagaban las mujeres al Estado –al igual que los hombres cumplían el Servicio Militar— donde se las instruía a ser la mujer de. A servir a su macho. Desde el Estado se creó por Pilar Primo de Rivera, la hermana del fundador de la Falange, una especie de ministerio femenino llamado Sección Femenina, donde la mujer aprendía a someterse al marido, al padre, incluso a los hijos de cierta edad. Donde las enseñaban a servir a su macho y todo su objetivo era ser su esclava en la casa y en la cama.



No. Tenemos que avanzar. Es verdad que ya no estamos como hace sesenta años, pero todavía podemos, todos, observar, como hay una desigualdad profunda entre los derechos del hombre y de la mujer. No cabe duda. Los micromachismos son hoy algo común. Cualquier hombre podemos cometerlos, sobre todo si pertenecemos a una generación donde nos educaron para ser machos y no personas.

Y sigue habiendo cuestiones muy graves. ¿Acaso nadie se pregunta por qué en los conflictos de pareja, en la casi totalidad de los casos, el hombre es el verdugo y la mujer la víctima? ¿Por qué las bandas juveniles de peligrosidad social están compuestas casi en absoluto por hombres? ¿Por qué un hombre, por el mero hecho de serlo, gana un 20% más de salario haciendo las mismas funciones que una mujer? ¿Por qué sólo el 8% de los componentes de los consejos de administración de las grandes empresas son mujeres? ¿Quién es hoy, todavía, quien lleva adelante las mayores tareas de la casa y el cuidado de los niños? ¿Por qué, todavía, las palabras están cargadas de discriminación negativa en el caso de la mujer? ¿Por qué se penaliza laboralmente a la mujer por el mero hecho de poder ser madre?

Hay que acabar con esta lacra. Yo, para empezar, a vosotras mujeres, a las de mi entorno y a todas, quiero pedir perdón, por todo lo que he podido ofenderos en mi vida, perdón porque no he sido capaz de luchar con todas mis fuerzas por defenderos, porque seguramente todavía me queda algo de ese barniz que me inocularon en mi educación, en el colegio, en el entorno, en casa. Porque no os lo merecéis, porque un mundo con vosotras en igualdad, no tengo duda de que será mejor. Ojalá que la huelga de hoy sea el principio del fin y, emulando a Allende deseo que más pronto que tarde se abran las alamedas por donde pase la mujer libre para construir una sociedad mejor.

Salud, República e Igualdad de derechos entre mujeres y hombres

03 marzo 2018

Se ve y se siente: ‘Franco sigue presente’


Por mucho que traten de defenderse, el PP es un partido defensor del franquismo. Las pruebas no dan lugar a dudas. Y lo mismo ocurre con la monarquía, que heredera del franquismo, sigue sin desacreditar a su mentor.

Aquí recojo cuatro episodios ocurridos los últimos días que denotan claramente la connivencia del PP y la Monarquía con el franquismo:

·        Defensa ha gastado 23.000 euros en repatriar restos de 29 miembros de la División Azul. Y ello, manteniendo el presupuesto para recuperación de las víctimas del franquismo a cero, y aumentando los gastos de Defensa en un 30%. Doña Finiquita en Diferido está que lo tira.



·        Ocho eurodiputados de distintos partidos y diferentes países han visitado el Valle de los Caídos. Según sus propias declaraciones se han quedado de piedra al conocer el mayor mausoleo en honor de Franco, uno de los mayores genocidas del siglo XX, y ver cómo se rinde homenaje al criminal. De hecho, durante su visita, han podido comprobar cómo se celebraba una misa convocada por el Abad de la basílica, donde acudían franquistas que han increpado e insultado a los eurodiputados y han llegado a amenazar de muerte a Miguel Urbán de Podemos. La conclusión de la comitiva ha sido clara: “Se trata de un insulto para las víctimas y Europa tiene que conocer esta triste historia”. Se han propuesto hacer de altavoz del franquismo que cuenta con decenas de miles de víctimas asesinadas y sin enterrar, y con el apoyo de un gobierno que no cumple la ley de la Memoria Histórica.

·        Rajoy ha publicado en twitter  una foto suya ante un monumento en honor de Franco en Santa Cruz de Tenerife. No sólo no critica el franquismo, sino que además, M punto Rajoy, lo hace parte de su biografía. El autor del monumento es Juan de Ávalos, el mismo del Valle de los Caídos, y sigue sin retirarse porque el ayuntamiento del PP se niega a cumplir la Ley de la Memoria Histórica. Claro que ya sabemos que la ley hay que cumplirla, salvo que digo lo contrario el Partido Popular.


·        Un general en la reserva –Juan Chicharro Ortega-- es el nuevo presidente de la Fundación Francisco Franco. Este individuo fue ayudante de campo del rey Juan Carlos. En la toma de posesión del cargo, defendió al genocida Franco, de este modo: "un hombre, hoy atacado con saña por los mismos enemigos a los que derrotó en la guerra, y en la paz, y olvidado por una sociedad relativista que tanto le debe". Su esfuerzo al frente de la fundación, asegura, será por "la propagación de las ideas que posibilitaron al pueblo español alcanzar un estado de bienestar no bien comprendido, hoy". Así están las cosas. También el virus franquista está bien enquistado en la Casa Real.
  
Podrán salir diciendo pamplinas, podrán tratar de engañarnos, pero a los hechos nos remitimos, defienden el franquismo y permiten que siga campando por sus lares en este país al que consideran ‘una democracia avanzada’ y donde dicen que hay que cumplir las leyes (naturalmente se refieren al proceso catalán y no a la Ley de la Memoria Histórica)

Salud y República


01 marzo 2018

¡¡Se pueden y se deben actualizar las pensiones!!


Ha llegado el momento. No se puede esperar más. ¡Ya está bien! Los jubilados hemos pagado una alta factura durante la crisis, y quieren que la sigamos pagando. La revalorización del 0,25% aprobada por el PP es una subida vergonzosa y una tomadura de pelo.

Y todavía hay que escuchar decir a los peperos que los jubilados somos unos privilegiados y que hemos sido muy bien tratados durante la crisis. ¡Que barbaridad! Hemos tenido que pagar el copago –repago— médico, lo que supone unos diez euros mensuales de media por jubilado (o sea cuatro veces lo que se ha subido de pensión) y además hemos debido ayudar a nuestros hijos y nietos para que pudieran sobrevivir en esta crisis cruel en la que nos han metido, mientras ellos ayudaban y ayudan a bancos, a empresas y a autopistas de peaje.

Las pensiones no se han subido porque el PP no ha creído que era un asunto prioritario. Han preferido seguir otro camino. ¡Que no nos engañen! Que no vengan con historias y excusas. Es mentira que no se pueden subir, que no es el momento, que no salen las cuentas. La decisión de subir las pensiones es una decisión política, sólo política.


Tanto es así, que bastaría con que el capítulo de pensiones en este país supusiera un 14,5% del PIB como ocurre en la UE, de media, y no el 10,6 actual. Para igualar a los países de nuestro entorno hay casi cuatro puntos o sea, una posible subida de 40.000 millones, que no sólo serviría para actualizar las pensiones, sino para subir la pensión mínima a 1000 euros y algo más.

Pero claro, M punto Rajoy y su gente tienen otras prioridades. Porque sí, es posible hacerlo. Basta con obtener más ingresos y reducir o prescindir de otras partidas, menos prioritarias. Y saben cómo, pero no quieren, por si acaso les voy a dar algunas pistas:

·        Quitar las ayudas que reciben las empresas, por contratar trabajadores y otras causas, que no sirven para nada y hacen que estén pagando de media un 5% de impuestos cuando los trabajadores pagan el 20%.
·        Suprimir las ayudas, exenciones y subvenciones que recibe la Iglesia Católica (11.000 millones de euros anuales, según Europa Laica). Y de paso cumplir con la anunciada aconfesionalidad que dice la Constitución.
·        Imponer un impuesto adicional a los bancos sobre beneficios, por aquello de que les hemos dado, a fondo perdido, más de 60.000 millones y hoy están obteniendo plusvalías notables.
·        Aumentar el impuesto de lujo y los impuestos a los salarios y las rentas más altas, subiendo el IRPF a los que ingresan más de 60.000 millones al año.
·        Congelar y disminuir en lo posible, los gastos de defensa.

Podría seguir con algunas más, pero con estas medidas nos bastarían. El aumento del 1,5% del IPC  se cubriría con creces (unos 3.000 euros anuales) y además, se podría subir la pensión mínima y algo más, como solucionar parte de los problemas de las pensiones de las generaciones que vienen. Luego entonces hemos de acordar que se trata claramente de una decisión política. Que no digan que no pueden. Que digan la verdad: no quieren.

La movilización de los jubilados no ha hecho sino empezar. Y eso parece que ha puesto en jaque a los peperos. Ya empiezan a hablar de medidas –eso sí, raras e injustas— para calmar nuestros ánimos. No queremos limosnas, no queremos cheques, queremos una subida justa y merecida y una solución para los futuros jubilados.

Las movilizaciones van a seguir. Los peperos no se han dado cuenta de que con su avaricia y arbitrariedad han despertado “a la bestia”. Ya se ha dado el pistoletazo de salida, y vamos a llegar a la meta. Estoy convencido de que ganaremos esta partida. El PP debe dar marcha atrás y convocar seriamente al pacto de Toledo para solucionar el problema. Porque si no –y de esto estoy seguro--, las pensiones serán la tumba del PP.

Salud y República

P.D. Por cierto, sería conveniente que, para empezar, destituyeran a la presidenta de la Comisión del Pacto de Toledo: la desalmada Celia Villalobos.